Un nuevo enfrentamiento entre el presidente Gustavo Petro y el presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha surgido por las reformas laboral y tributaria que actualmente se discuten en el Congreso. La controversia se intensificó durante el XVI Conversatorio Nacional de la Especialidad Laboral de la Corte de Justicia, donde Cepeda expresó su firme oposición a la reforma laboral, argumentando que estas iniciativas amenazan el empleo y la economía del país.
Cepeda cuestionó la eficacia del proyecto de reforma laboral, que se encuentra en segundo debate en la Cámara de Representantes. “¿Cómo así que una reforma laboral no genera empleo ni ataca la informalidad? No estoy de acuerdo con una reforma que atente contra el empleo de los colombianos, no quiero medio millón más de desempleados”, enfatizó el dirigente conservador. Con cifras alarmantes, Cepeda recordó que de los 52 millones de colombianos, solo 10 millones tienen trabajos formales, y advirtió que la reforma podría agravar la situación.
En su intervención, Cepeda subrayó que el Senado debe ser un baluarte en la defensa del empleo, afirmando: “La palabra mágica es concertación y respeto. Las cosas que convengan a los colombianos pasarán, y las que les hagan daño, no”. Su postura refleja un compromiso por mantener el equilibrio de poderes y proteger los intereses laborales de los ciudadanos.
Ante las críticas de Cepeda, Petro respondió a través de su cuenta en X, defendiendo la reforma y descalificando la noción de que un aumento en los salarios provoque un aumento en el desempleo. “La experiencia de mi Gobierno es que hemos elevado el salario real y, durante este tiempo, ha crecido el empleo”, aseguró el presidente, enfatizando que la teoría de que subir salarios genera desempleo es, en su opinión, una falacia.
La controversia no se limitó solo a la reforma laboral. La discusión también se extendió al proyecto de ley de financiamiento, que busca recaudar más de 12 billones de pesos para cubrir el déficit del presupuesto general de la nación para 2026. Esta iniciativa ha sido criticada por Cepeda, quien ha manifestado que se debe evitar cualquier reforma que dañe la economía.
Petro, por su parte, defendió la ley de financiamiento, asegurando que contiene elementos fundamentales para la generación de empleo, además de la política de crédito dirigida a empresarios y asociaciones productivas. A pesar de la resistencia, el Gobierno se prepara para emitir un presupuesto de 523 billones de pesos, a pesar del desfase financiero que enfrenta.
La tensión entre Petro y Cepeda resalta la polarización en el Congreso y la dificultad que enfrenta el Gobierno para implementar sus reformas en un entorno de críticas y preocupaciones sobre el futuro económico del país. La continuidad de estos debates será crucial para determinar la dirección de la política laboral y tributaria en Colombia.