Ante la preocupante situación de bloqueos, cada vez más recurrentes y prolongados, que se registra en diferentes regiones del país y los riesgos que esto implica para los colombianos, la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), en representación de las empresas mayoristas de distribución de combustibles líquidos, advirtió siete situaciones críticas en departamentos productores de Colombia.
Por ejemplo, el abastecimiento de gasolinas, diésel y jet fuel (combustible de aviación), como un servicio esencial para los colombianos, se ha visto afectado por los crecientes bloqueos de vías, principalmente en Cundinamarca, Meta, Huila, Santander y Cesar.
La Asociación Colombiana del Petróleo y Gas, a través de una comunicación oficial, alertó que, en lo corrido del año, se han identificado al menos 180 bloqueos con una duración de hasta nueve días, lo cual ha interrumpido el despacho de combustibles líquidos desde las plantas de abasto mayoristas hacia estaciones de servicio y aeropuertos.
Afectaciones
María Adelaida Pradilla, gerente Downstream de la ACP, explicó que las plantas más afectadas son las de Mansilla en Facatativá, Sebastopol en Santander y Apiay en el Meta.
“La situación ha causado desabastecimiento en algunas estaciones de servicio de estos departamentos, especialmente, durante los meses de julio y agosto”.
Es importante destacar que la planta de Mansilla abastece de combustibles a Bogotá, al aeropuerto El Dorado y a una parte de la región de la Orinoquía.
Qué dicen los mayoristas
Ante esta problemática, los distribuidores mayoristas manifestaron que han multiplicado su esfuerzo por implementar alternativas logísticas que permitan continuar garantizando el abastecimiento de combustibles líquidos a todos los colombianos.
“Consideramos que la manifestación pacífica es importante para la construcción de un país más incluyente, siempre y cuando esta no vulnere los derechos de quienes deciden no protestar. Además, rechazamos las vías de hecho y los crecientes bloqueos que amenazan la prestación de un servicio esencial como lo es el abastecimiento de combustibles”, dijo la ACP en un comunicado.
El gremio también hizo un llamado al Gobierno nacional, a las autoridades y a los manifestantes para que se logren acuerdos mediante el diálogo y la concertación, siempre bajo la garantía del respeto de los derechos humanos.
“Además, extendemos nuestra solidaridad con las personas afectadas por los bloqueos: agricultores, transportadores, comerciantes, entre otros”, agregó la ACP.
Finalmente, este gremio aclaró que las empresas mayoristas ratificaron su disposición para continuar trabajando de forma articulada con las autoridades nacionales y locales, para garantizar la prestación del servicio de abastecimiento de combustibles.
De acuerdo con el seguimiento que hace Colfecar, gremio de transportadores de carga y logística, a los bloqueos de las carreteras en Colombia, entre el 1 de enero y el 31 de agosto, se han registrado 501 cierres viales por movilizaciones sociales y protestas de comunidades, los cuales han hecho perder 7.029 horas, es decir, 292 días a transportadores y empresarios.
Ante este crítico panorama, Nidia Hernández, presidente ejecutiva de Colfecar, consideró que estos bloqueos son un golpe significativo a la productividad de todos los sectores productivos, lo que implica sobrecostos y lucro cesante a los vehículos.
“Además de los productos que se dañan en los vehículos y animales que también sufren en estos puntos de bloqueos, al final esto termina impactando los precios especialmente de los alimentos”, precisó la dirigente gremial.
Hernández recalcó que a las personas que quedan en la mitad de estos bloqueos se le están violando los derechos a la movilidad y al trabajo.
“Nos genera gran preocupación el anuncio de la movilización campesina para promocionar la reforma agraria y que prevé posibles bloqueos a las vías, los cuales se sumarían a los que ya llevamos a cuestas y están ocasionando una asfixia logística”.
Esta situación también la detalló Arnulfo Cuervo Aguilera, vicepresidente de Fedetranscarga, quien reiteró que el transporte de carga es el motor de desarrollo de la economía, el abastecimiento y el eslabón de la cadena de suministro del país.
El directivo gremial agregó que los cierres y bloqueos en carreteras han sido otro obstáculo para la actividad transportadora, lo que ha determinado un aumento en el valor de los productos y bienes que se mueven, como consecuencia de mayores kilómetros recorridos y más tiempo. “Eso presiona nuestro margen de utilidad y rentabilidad”.