✅En las próximas semanas, las más de 100 piezas pasarán por un nuevo proceso de evaluación, en el cual intervendrá un equipo de expertos para determinar, de manera definitiva, la pertenencia al patrimonio arqueológico de la nación, así como identificar a qué áreas arqueológicas pertenecieron. Del mismo modo, los elementos etnográficos serán estudiados para conocer su lugar de procedencia y
determinar su estado de conservación.
✅Este logro responde a un trabajo de diplomacia cultural entre la Cancillería, el Minculturas y el ICANH por salvaguardar nuestro patrimonio cultural. En este Gobierno, Colombia ha recuperado 891 bienes culturales.
El Ministerio de Relaciones Exteriores entregó de manera oficial al Instituto Colombiano de Antropología e Historia – ICANH más de 100 piezas arqueológicas y etnográficas repatriadas de Estados Unidos.
En el acto de entrega, que se llevó a cabo el 2 de octubre en el Palacio de San Carlos, el canciller Luis Gilberto Murillo afirmó que la Cancillería, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, y el ICANH han aunado esfuerzos para gestionar el retorno al país de 891 piezas de interés cultural, durante el gobierno de Gustavo Petro.
“La repatriación de todos estos bienes es un triunfo de la reivindicación de la soberanía cultural y también el reconocimiento de los derechos culturales de nuestros pueblos. Es un paso fundamental para preservar la memoria colectiva y promover un sentido de pertenencia entre todos los colombianos y todas las colombianas”, precisó el canciller.
Luis Gilberto Murillo también manifestó que la Cancillería, Minculturas y el ICANH están llevando a cabo una tarea fundamental para el país con las repatriaciones de objetos arqueológicos y etnográficos: “Estamos construyendo un futuro en el que nuestra cultura sea valorada y protegida, y esté en nuestro país.
Sigamos adelante con este compromiso de salvaguardar nuestra herencia y fortalecer el lazo que nos une como nación”, afirmó.
A su vez, Juan David Correa, ministro de las Culturas, las Artes y los Saberes, sostuvo que “la repatriación de estas piezas es una muestra de lo que el gobierno actual ha hecho desde su diplomacia cultural, que se pregunta cómo está Colombia en el mundo y cómo están sus patrimonios”. Y agregó: “Detrás de la repatriación hay un trabajo enorme de caracterizar, evaluar y traer los objetos al país”.
¿Qué tarea le espera al ICANH con la entrega de estos objetos?
Las piezas arqueológicas y etnográficas fueron entregadas de manera voluntaria en la Embajada de Colombia en Washington, durante el mes de septiembre de 2024
Parte de las piezas pertenecieron a la colección privada de James Lawrence, miembro del Cuerpo de Paz en el Putumayo entre los años 1970 y 1972, quien adquirió los objetos en mercados locales del departamento y los llevó a Nueva York.
Luego de su fallecimiento en 2023, su hijastra, Jessica Lawrence, entregó las piezas a la embajada colombiana en la capital estadounidense. Otra parte de los objetos fue entregada de manera anónima.
Posteriormente, el Instituto Colombiano de Antropología e Historia – ICANH hizo una evaluación preliminar de las piezas por medio de fotografías, conceptuando que, por su estilo, composición y atributos, hacían parte del patrimonio arqueológico de la Nación.
Con la entrega de la colección por parte de la Cancillería, el equipo del Laboratorio y Colecciones Arqueológicas del ICANH inició el diagnóstico de los estados de conservación de los objetos y analizó la verificación de cada una de las piezas reportadas en la lista preliminar, por medio de las fotografías tomadas en la Embajada de Colombia en Washington.
En las próximas semanas, las más de 100 piezas pasarán por un nuevo proceso de evaluación, en el cual intervendrá un equipo de expertos para determinar, de manera definitiva, la pertenencia al patrimonio arqueológico de la nación, así como identificar a qué áreas arqueológicas pertenecieron. Del mismo modo, los elementos etnográficos serán estudiados para conocer su lugar de procedencia y determinar su estado de conservación.
Además, cada elemento pasará por un proceso de diagnóstico con el fin de evaluar si es necesario hacer algún tipo de estabilización o intervención, en términos de conservación y restauración. Una vez todas las piezas se encuentren verificadas, ingresarán al inventario de bienes arqueológicos de la Nación para que, a futuro, puedan ser consultadas por la ciudadanía con el fin de facilitar su investigación, exhibición y divulgación.