Ante la oleada de críticas por la propuesta del senador del Pacto Histórico para crear el delito de “obstrucción a la paz”, Cepeda decidió ajustar el articulado y volverlo a presentar.
Ni una semana duró el proyecto de ley que el senador del Pacto Histórico, Iván Cepeda, radicó ante el Congreso. Esta vez, las críticas y cuestionamientos le jugaron en contra y tuvo que retirar la polémica propuesta con la que pretendía crear un delito de “obstrucción a la paz”. Y a eso se le suma la poca claridad que se prestó para múltiples versiones, por lo que Cepeda optó por ajustar el articulado y volverlo a presentar.
Con ese proyecto de ley, que no es la primera vez que escala hasta el Capitolio, el senador buscaba sancionar y erradicar cualquier acto que impida que la paz sea una realidad en el país. Y fue precisamente esa premisa la que levantó dudas en varios sectores políticos, sobre todo desde la oposición.
Pero fue tanta la polémica que hasta el fiscal general Francisco Barbosa se refirió al proyecto como un intento de totalitarismo para enviar a la cárcel a los que se vayan en contra de la paz total que ha impulsado el presidente Gustavo Petro.
En esa misma línea se pronunció una de las voces más reconocidas del Centro Democrático, la senadora María Fernanda Cabal, quien aseguró que es una estrategia para defender la paz total de Petro.
“¿Qué tal esto? Ahora los sectores radicales de la izquierda quieren crear un nuevo tipo penal denominado ‘obstrucción a la paz’, para judicializar a todo aquel que se oponga a la farsa de ‘paz total’”, dijo Cabal.
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Ante los cuestionamientos a su proyecto, el senador Cepeda anunció en los micrófonos de W Radio que prefiere retirar la propuesta y redactarla de nuevo. La decisión la toma justo un día después de hacer público el proyecto en sus redes sociales y explicar de qué se trataba.
Sin embargo, al congresista le tocó volver a aclarar la finalidad del articulado y dijo que en realidad “tener una opinión contra un proceso de paz es totalmente legítimo” y que el alcance del proyecto va mucho más allá.
“Se constituye como obstrucción a la paz cuando se atenta contra firmantes, contra personas desmovilizadas, contra líderes y lideresas sociales que participan en un proceso de paz o contra cualquier persona que trabaje en un proceso de paz”, explicó Cepeda.
Uno de las problemáticas que pretendía atacar el proyecto de ley de Cepeda es el asesinato de firmantes del acuerdo final de paz. Pero con especial énfasis en los homicidios de mujeres, sobre todo si son excombatientes, constructoras de paz, defensoras de Derechos Humanos, lideresas sociales.
Además, la iniciativa también proponía sancionar las mentiras o las acciones delictivas para frustrar los procesos de paz. Y fue precisamente esa premisa de “mentir” la que puso a tambalear el proyecto y levantó polémica.
“Si por oponernos a falsos diálogos de paz nos van a meter presos, quiero ser el primer al que le pongan las esposas (…) Están asesinando nuestra fuerza pública, secuestrando nuestros colombianos, mientras guerrilleros y gobierno se sientan en un banquete a contar muertos”, señaló el senador Jota Pe Hernández.
El proyecto ya había sido presentado en 2022, finalmente se archivó porque no tuvo discusión. En esta oportunidad, fue el mismo proponente quien decidió retirar la iniciativa y ajustar los detalles finales.