Parece que sumar éxitos y dólares a sus cuentas bancarias no es suficiente para dos de los hombres más ricos del mundo, pues además de a los negocios se dedican a cultivar sus cuerpos y quieren llevar eso más allá de las oficinas de las redes sociales que manejan. pues el dueño de Twitter, Elon Musk, retó al dueño de Meta, Mark Zuckerberg, a una pelea dentro de una jaula, al estilo de los combates de artes marciales mixtas.
Ambas redes sociales mantienen una pugna comercial desde hace años que ahora llegó al terreno personal, aunque en tono humorístico, por el momento. Poco después de que Musk comprara Twitter, Meta (la casa matriz de Facebook) anunció planes para lanzar su propia plataforma de comunicación social con texto solamente, lo que la convertiría en un rival directo. Desde entonces Musk ha lanzado varias frases picantes a Zuckerberg en Twitter, hasta que esta semana tuiteó directamente: «Estoy listo para una pelea en una jaula, si él está de acuerdo».
Jiu Jitsu, especialidad de Zuckerberg
Zuckerberg es amante del jiu jitsu, un arte marcial japonés. El miércoles respondió en Instagram con un escueto mensaje: «Dime el lugar». «Dios, haz que esto sea verdad», pidió en Twitter un periodista especializado en tecnología, Taylor Lorenz.
«El mejor combate enjaulado entre Musk-Zuckerberg sería aquél en el que entran dos tipos y no sale ninguno», escribió otro bloguero, Bennett Tomlin. Por su parte, AFP pidió a Meta una confirmación de un posible evento.
Rivalidad llevada a las jaulas
Las peleas dentro de jaulas son una especialidad que se conoce como «ultimate fighting championship» (UFC), un campeonato especialmente violento en Estados Unidos, en el que se admite una amplia panoplia de golpes con las extremidades.
Musk respondió recientemente con tono airado a una sugestión de un alto responsable de Meta que comentó que el público quería una alternativa a Twitter «dirigida de forma responsable». El multimillonario, que ha fundado empresas visionarias como Tesla y SpaceX, se gastó 44,000 millones de dólares para comprar Twitter, y al asumir el cargo despidió a la mayoría de su personal.
Zuckerberg por su parte apostó el año pasado por el metaverso para darle un nuevo impulso a Facebook, una estrategia que por el momento no ha dado los frutos esperados.