El mundo está expectante de este 6 de mayo, el día en el que se convocado a la coronación de Carlos III como el nuevo rey del Reino Unido, esto luego de la muerte de su madre, la icónica reina Isabel II, quien falleció el 8 de septiembre de 2022 tras haber permanecido 70 años en el trono. La familia real británica es un referente en cuanto a monarquía se refiere, los lentes siempre apuntan hacia ellos y también las críticas sobre su vida personal, pero sobre todo las que van al imperialismo y a la figura política que significan para los pueblos oprimidos.
Carlos III, el ahora rey, siempre ha estado en la polémica y desde la infidelidad y la muerte de Diana de Gales. En fechas recientes, entre lo que más ha revivido las polémicas de la familia real y su papel en la sociedad se halla la serie producida por Netflix, The Crown (La Corona), en la que abiertamente y se utiliza a los monarcas y sus consanguíneos para crear un drama -en ocasiones exagerado- según los expertos.
Carlos III en Netflix
La era del nuevo monarca comenzó casi a la par con el estreno de la quinta temporada de The Crown, en la cuál se destapan sus más terribles actos y aunque algunos son total y absolutamente falsos -pequeño spóiler- como el retrato que se hace de una posible conspiración para sacar a su madre del trono, otros son un fiel retrato de la realidad, como la conversación que tuvo con Camilia -cuando era su amante- y fue filtrada a la prensa.
A lo largo de estas cinco temporadas, la serie ha sido multipremiada y multinominada, entre los galardones que hay por su producción están El Globo de Oro, el BAFTA, el Emmy; entre otros muchos. En esta última temporada -que promete ser una antes de terminar- lo críticos llegaron a comparar la con una telenovela, sobre todo por el sentido en el que se van contando las «anécdotas» del hoy monarca, o cierto es que no todo está fuera de la realidad, porque para la familia real los 90 fueron todo un escándalo.
