Por: Juan Carlos Ortiz Díaz Consultor en Seguridad y Gerente Regional Seguridad Diez BGA @seguridaddiez.bga / @juancarlosortiz.diaz
Dando una mirada al acontecer político de las últimas semanas, uno se podría preguntar, ¿cuándo va a empezar a gobernar el actual presidente de La República?, de verdad es que es muy indignante que este señor se la pase de distractor en distractor para ocultar su falta de capacidad y liderazgo para tomar acciones en torno a las verdaderas problemáticas que actualmente afronta el país.
Lamentablemente nuestra sociedad tiene un gran problema, y es que no tenemos memoria, olvidamos por completo todos esos temas coyunturales que a través de la historia han ocurrido y que, de manera fehaciente, afectan nuestra realidad en el presente, pero con el agravante de que no solo genera dicha afectación, sino que es la burla constante de la clase política, que firma hasta en mármol algo, para luego en nuestra cara, de la forma más descarada, afirmar completamente lo contrario.
Y es que, haciendo remembranza, es oportuno mencionar, que, al actual presidente, se le olvidó por completo, las trece promesas firmadas en mármol el 8 de junio de 2018, entre las cuales destacó lo siguiente: “no convocaré a una Asamblea Constituyente …” por consiguiente uno por estos días se pregunta, el presidente por lo visto tampoco tiene memoria, porque no tiene sentido que este hablando de una hipotética asamblea nacional constituyente. Que pretende este señor al polemizar sobre este tema, el cual conforme a sus compromisos públicos y “firmados en mármol”, no debería aparecer en sus alegóricos discursos públicos. Definitivamente al ver este tipo de hechos, se evidencia lo ineficaz que es este gobierno, no teniendo, por ende, otra alternativa que lanzar cortinas de humo con un fin distractor, y que nuestro foco se pierda de la verdadera problemática; a este gobierno le está quedando grande el país, lo cual a mucho no nos sorprende, pues ya sabíamos que este sería el resultado en manos de esta izquierda ególatra.
Ahora, como al señor presidente le encanta mojar prensa y generar polémica; resulta que, sin haberse ido el mal sabor del tema de la constituyente, entró en un show mediático con el presidente de Argentina Javier Milei, debido a que este en una entrevista ante la CNN, lo calificó de asesino, terrorista y comunista, lo cual sin lugar a dudas es bastante fuerte desde la postura diplomática que un mandatario debería tener al referirse a otro dirigente; sin embargo era de esperarse algo de este talante, por parte de Milei que no tiene tapujo alguno en decir las cosas y por otra parte, Petro por más progresista que quiera ser, no puede ocultar su pasado, el cual no trataremos en esta columna.
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La reacción de Petro ante las afirmaciones de Milei es otro distractor que se suma a toda la parafernalia que lo rodea, para así distraer a la opinión pública respecto a las carencias administrativas y la falta de liderazgo y gobernabilidad de su gobierno del cambio. Sin embargo, siendo objetivos, lo ocurrido con el líder argentino es otra muestra del desequilibrio actual en torno a las relaciones diplomáticas con los gobiernos que no rezan las políticas de la izquierda latinoamericana. Si fue capaz de cometer los peores errores con el gobierno de Israel, que podíamos esperar del manejo ante lo ocurrido con Argentina.
En fin, como el objetivo no es darle trascendencia a los despropósitos que comete este gobierno, con el fin de seguir confundiendo y generando infinitos distractores ante el pueblo colombiano; la verdadera pregunta debería ser… ¿Y Para Cuándo Estará En La Agenda Gobernar?, y es que no puede ser otra la pregunta en este momento; donde está el cambio que prometieron, que pasa con los recursos de la salud, que pasa con la seguridad del país, ¿Qué pasa señor presidente?, porque literal, lo que si pasa, es que aunque suene confuso, nada pasa en torno a la gestión política, y el famoso cambio solo ha sido para mal y no se evidencia la preocupación de esta administración en defender los derechos de los ciudadanos, en incentivar la inversión, en implementar políticas públicas que propendan por la calidad de vida para los Colombianos. Ya es hora de gobernar, bueno en realidad hace mucho inició ese plazo, ya hace casi 2 años, y a pesar de eso, no se evidencia el desenlace del cuento de hadas de la izquierda y el progresismo en Colombia.
Como duele el país señores, que lamentable es esta realidad. Pero bueno, sabemos que somos más los que trabajamos por cambiar las cosas, que confiamos en el potencial de la gente, en las estrategias de los gobernantes que, si trabajan por una nación pujante, que ha superado las tempestades y que se enfoca en construir el futuro de las próximas generaciones, lamentablemente nos tocó a muchos aceptar el experimento de un gobierno de izquierda, para que se evidenciara la equivocada ruta que es permitir su continuidad en las próximas justas electorales.
