No le salió bien al Partido Liberal una encuesta que contrató con la que esperaba despejar el camino para definir el aval para la Alcaldía de Bucaramanga. La firma Invamer realizó 600 encuestas personales entre el 28 de abril y el 6 de mayo para consultar la intención de voto en la capital de Santander, a poco más de cinco meses de las elecciones locales de octubre próximo.
El mecanismo habría sido convenido con Simón Gaviria, hijo del expresidente César Gaviria, confiados en que sería favorable para el exsenador liberal Horacio José Serpa y que con la ventaja que sacara se podría negociar el retiro de otros aspirantes que están en la pelea, principalmente del exsecretario general del Partido Liberal, Miguel Ángel Sánchez.
Sin embargo, el resultado no fue el esperado. Contrario a lo que pensaban, la encuesta muestra que Miguel Ángel Sánchez lleva la delantera con un 46,4%, frente al 43,4% que marca Horacio José Serpa.
Ese escenario no lo contemplaban en la colectividad, pues daban por hecho que por su trayectoria y reconocimiento, sumado a la figura de su padre, el excandidato presidencial y exgobernador de Santander Horacio Serpa Uribe, sería Horacio José el puntero.
Así las cosas, Simón Gaviria planea adelantar una reunión con Álvaro Rueda, Miguel Ángel Pinto y Jaime Durán Barrera, los tres congresistas liberales de Santander, y también con los precandidatos, para revisar el mecanismo definitivo para seleccionar el candidato oficial del Partido Liberal a la Alcaldía de Bucaramanga, el cual se espera salga por consenso.
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