El ministro de Hacienda de Colombia, José Antonio Ocampo, dijo este jueves que no se descarta un incremento en los subsidios en el país como herramienta para atacar la disparada inflación.
Así lo confirmó en su presentación en el 7° Congreso Empresarial Colombiano y la 78ª Asamblea Nacional de la ANDI.
El funcionario señaló que, si bien el Banco de la República no tenía una alternativa diferente a subir las tasas en el país, estas no tienen un efecto completo en los mayores precios.
De hecho, afirmó que la política monetaria puede tener un coletazo en la inflación de demanda, pero no en la de oferta, que es la que ha venido subiendo en mayores niveles.
Así las cosas, dijo que el golpe podría resolverse con subsidios adicionales para los hogares pobres.
No obstante, no entregó detalles de si esto se haría con ayudas adicionales en programas como Familias en Acción o Ingreso Solidario, o por medio de subsidios a productos como alimentos.
Lo que sí agregó es que la solución también iría de la mano de una “política agresiva de autoabastecimiento de alimentos”, con procesos orgánicos que reduzcan la necesidad de fertilizantes químicos
Desaceleración
De otro lado, el ministro Ocampo señaló que la reactivación en Colombia ha sido fuerte por el levantamiento de las medidas de aislamiento, así como por las políticas expansivas en materia fiscal y monetaria.
Sumado a lo anterior, el contexto internacional ha favorecido el dinamismo de la actividad económica, principalmente por un mayor comercio y por los precios favorables de productos básicos en el mercado internacional.
Lo anterior ha llevado a que las perspectivas de crecimiento económico de Colombia sigan siendo positivas en el corto plazo.
De hecho, se espera que el producto interno bruto (PIB) del país llegue a 6,5 % en todo el 2022.
Eso sí, este indicador estará marcado por un segundo semestre de menores crecimientos de la economía, en un proceso de desaceleración que viene registrando la Nación.
Mientras en el segundo trimestre, el PIB habría crecido 12,3 %, en el tercero llegaría a 4,1 % y el cuarto, 1,9 %.
En cuanto a deuda pública bruta, Ocampo afirmó que cerraría el año en 59,1 %, mientras que la neta llegaría a 56,5 %, es decir, cerca al 55 % de meta que fija la Regla Fiscal.