Luego de cuatro días de huelga de hambre en el patio 3 de la cárcel de Palogordo, en Girón, Santander, la Defensoría del Pueblo medió para que la actividad fuera levantada.
Por petición de los internos que adelantaban la huelga, un equipo de funcionarios de la Regional Santander convocó a representantes de entidades locales y nacionales a una mesa de diálogo: Gobernación de Santander, Procuraduría Regional, Dirección de la Penitenciaría con Alta y Mediana Seguridad de Girón y Dirección Regional del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec). Del espacio, igualmente, formaron parte voceros de derechos humanos de los diferentes patios del centro carcelario.
El propósito, que a estos últimos les fueran escuchadas sus peticiones en torno a temas relacionados con los servicios de salud y alimentación y todo lo concerniente a las condiciones de la infraestructura del penal.
Ante la falta de acuerdos, la Defensoría gestionó una carta de intención para que se sumen a una nueva reunión, programada para el 9 de agosto, la IPS Sersalud, la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec), la Personería de Girón y el contratista de alimentación Macsol.
El hecho de que la Defensoría Regional Santander lograra programar un nuevo espacio de consensos, fue clave para que la huelga de hambre llegara a su fin en el penal.
Llegar a acuerdos definitivos y posteriormente a la firma de compromisos desde un enfoque de derechos es el llamado que hace la Defensoría del Pueblo a las partes.