El presidente Gustavo Petro asistió este domingo a la posesión de Luiz Inácio Lula da Silva como mandatario de Brasil. El jefe de Estado colombiano tuvo la oportunidad de saludar a Lula y auguró un “camino irreversible” de integración en América del Sur.
Petro, quien estuvo acompañado del canciller Álvaro Leyva, estuvo presente en la sede del Congreso Nacional, donde participó en la sesión formal de toma de posesión de Lula da Silva como presidente. Allí tuvo la oportunidad de saludar al mandatario electo y trinó: “Ojalá estos cambios políticos provoquen el camino irreversible de la integración de la América del Sur”.
En la posesión del presidente Lula en Brasilia.
Ojalá estos cambios políticos provoquen el camino irreversible de la integración de la América del Sur. pic.twitter.com/gV0NKSA2AC
— Gustavo Petro (@petrogustavo) January 1, 2023
Posteriormente, Petro sostuvo un fraternal saludo con el mandatario brasileño en el Palacio Presidencial de Planalto en Brasilia. Lo anterior, en el marco de un acto protocolario de saludos de las delegaciones internacionales al nuevo jefe de Estado brasileño.
Tras el encuentro, se tiene previsto que el presidente colombiano sostenga reunión bilateral con el presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, con quien tratará asuntos relacionados con las relaciones de Colombia con este país y la Unión Europea.
Posteriormente, este lunes 2 de enero Petro desarrollará una agenda de trabajo en Brasilia, que incluye varias reuniones bilaterales, entre ellas una con el presidente Lula da Silva, quien ejerce por tercera vez dicha dignidad.
En octubre pasado, Petro dijo que los principales puntos de una agenda bilateral con Brasil serían el rescate de la selva amazónica y su investigación científica; el camino de una nueva política antidrogas “no violenta”; la red integrada de energía eléctrica de América con energías limpias, y la integración económica latinoamericana.
El presidente de Brasil prometió este domingo en su primer discurso en el cargo “rescatar” del hambre a 33 millones de personas y de la pobreza a 100 millones de personas, casi la mitad de la población del país. “Nuestras primeras acciones apuntan a rescatar del hambre a 33 millones de personas y rescatar de la pobreza a más de 100 millones de brasileñas y brasileños, que soportaron la más dura carga del proyecto de destrucción nacional que hoy se cierra”, dijo Lula en su discurso en el Parlamento.
En la misma línea, el nuevo presidete de Brasil prometió “reconstruir” el país de las “ruinas” en las que, según apuntó, quedó tras la gestión del ultraderechista Jair Bolsonaro, a quien no citó. “Sobre estas terribles ruinas asumo el compromiso de, junto con el pueblo brasileño, reconstruir el país y hacer nuevamente un Brasil de todos y para todos”, afirmó el líder progresista.
Lula señaló que su equipo de transición hizo un diagnóstico de las cuentas públicas y se encontró con un panorama “atroz”. “Vaciaron los recursos de la Sanidad. Desmantelaron la Educación, la Cultura, la Ciencia y la Tecnología. Destruyeron la protección del medioambiente. No dejaron recursos para comidas escolares, vacunación o seguridad pública”, enumeró.