Con 61 votos a favor, de 130 posibles, el Congreso peruano aprobó una moción en rechazo a las opiniones del presidente sobre la situación política que involucra al expresidente de ese país, Pedro Castillo.
El Congreso de Perú aprobó una moción parlamentaria en rechazo a “los constantes actos de intromisión en los asuntos internos” del país andino por parte de los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador, y de Colombia, Gustavo Petro.
La moción fue aprobada con 61 votos a favor, de entre 130 parlamentarios con los que cuenta el Congreso peruano y se produce días después de que ambos mandatarios, junto a los de Bolivia, Luis Arce, y Argentina, Alberto Fernández aseguraran que el exmandatario Pedro Castillo es “objeto de un tratamiento judicial (…) violatorio” y pidieran que se respete la “voluntad ciudadana” expresada en las urnas por el pueblo peruano.
La moción plantea “expresar el rechazo a los constantes e inaceptables actos de intromisión en los asuntos que son de la jurisdicción interna del perú por parte” de López Obrador y Petro “en perjuicio de la República del Perú”.
También consideran que sus declaraciones constituyen “una violación al derecho internacional en perjuicio” de Perú y exhortan al Ministerio de Relaciones Exteriores “a que eleve la presente moción” al embajador mexicano en Lima, Pablo Monroy, que fue expulsado del país por el Gobierno de la presidenta Dina Boluarte. También pidieron que la Cancillería lleve la moción aprobada al embajador de Colombia en Perú, Eufracio Morales.
El pasado 15 de diciembre, el Gobierno peruano llamó a consultas a sus embajadores en México, Colombia, Argentina y Bolivia, por lo que considera una injerencia en sus asuntos internos por dichos países, al cuestionar la sucesión presidencial en Perú.
El primer ministro peruano, Alberto Otárola, pidió seis días después a López Obrador que “pare de referirse a Perú”, horas después de que el mandatario dijera que el Ejecutivo del país andino es “muy cuestionado” por “optar por la represión”.
“Hacemos un llamado a que el señor López pare de referirse al Perú, porque hemos conseguido con mucho esfuerzo que nuestro país esté en paz y no vamos a permitir que personas que no tienen ninguna relación con el Gobierno de Perú puedan manifestarse causando incesante intromisión en los asuntos de Perú”, dijo Otárola en una rueda de prensa.
López Obrador había dicho en su conferencia de prensa diaria que el Ejecutivo peruano es “muy cuestionado en su conjunto por su proceder, sobre todo por optar por la represión y no buscar al conflicto de Perú una salida mediante el diálogo y con el método democrático de convocar a elecciones lo más pronto posible para evitar que haya una situación de inestabilidad política”.
El mandatario mexicano consideró que, esta inestabilidad, afecta “fundamentalmente al hermano pueblo de Perú”.
“Sabemos distinguir muy bien entre lo que es el pueblo de Perú, un pueblo hermano, y la actitud de la llamada clase política, de los grupos de poder económico y político del Perú que son los que han mantenido esta crisis en ese país por sus ambiciones personales, sus intereses económicos”, subrayó.
El Gobierno mexicano ha dado asilo a la esposa e hijos del expresidente Pedro Castillo, así como al exmandatario, quien se encuentra preso en Lima tras su fallido autogolpe de Estado.
-EFE-