El ejército de Rusia anunció este jueves su retirada de la isla de las Serpientes, una posición estratégica en el mar Negro conquistada por Moscú y que había sido objeto de contraataques ucranianos en las últimas semanas.
“El 30 de junio, en señal de buena voluntad, las fuerzas armadas rusas cumplieron los objetivos fijados en la isla de las Serpientes y retiraron su guarnición allí“, dijo el portavoz del ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov.
El ministerio ruso de Defensa afirmó que la retirada era una demostración al mundo de que “Rusia no está impidiendo los esfuerzos de la ONU de organizar un corredor humanitario para enviar por barco productos agrícolas desde Ucrania”.
Rusia agregó que “el balón está ahora del lado de Ucrania”, y acusó al país pro-occidental de no haber desminado aún su costa en el mar Negro.
“Ya no hay tropas rusas en la isla de las Serpientes. Nuestras Fuerzas Armadas hicieron un gran trabajo”, dijo el asistente presidencial ucraniano Andryi Yermak en Twitter.
El comando militar del sur de Ucrania escribió en Facebook que durante la noche Rusia “evacuó apresuradamente los restos de su guarnición” de la isla después de “ataques de nuestras unidades de misiles y artillería”.
Dijo que la isla está “cubierta de fuego” y publicó una foto de lo que parece ser la isla con nubes de humo.
Ucrania ha acusado a Rusia de robar sus granos, contribuyendo así a la escasez mundial de alimentos provocado por el bloqueo de exportaciones de productos agrícolas en puertos ucranianos.
Desde los inicios de la ofensiva rusa, la pequeña isla de las Serpientes se convirtió en símbolo de la resistencia ucraniana después de que un grupo de guardias ucranianos que la defendía rechazara en un mensaje de radio la orden de rendirse lanzada desde un buque ruso.