Uno de los políticos que más ha copado los medios en el último año es Agmeth Escaf; el actor y presentador de televisión se convirtió en una pieza clave del Pacto Histórico en la costa Atlántica, pues encabezó la lista a la Cámara de Representantes desde ese departamento. Su importancia, sin embargo, no viene de sus habilidades políticas, sino sociales, así quedó claro en la entrevista que Nicolás Petro le concedió a la revista Semana.
Una vez en el Congreso, y como presidente de la comisión séptima de la Cámara, Escaf tuvo en sus manos el trámite de varias reformas importantes —como la de la Salud—, y en varias oportunidades se le vio acompañado por la primera dama Verónica Alcocer, una de sus grandes amigas.
Para nadie en la Casa de Nariño es un secreto de la relación que durante años han tenido Escaf y Alcocer, una amistad entrañable que ahora tiene al primero como un alfil de vital importancia en las filas del Pacto Histórico, pese a que su experiencia política es casi nula.
Según le dijo Nicolás Petro a Semana, Agmeth Escaf fue impuesto desde Bogotá por “la señora Verónica con el señor Eduardo Noriega. Es mentira que él tenía votos, que la imagen. Falso. Al que hubiesen querido poner, hombre o mujer, en la cabeza de la lista del Atlántico hubiese salido elegido, esa es una realidad política”.
El supuesto poder de Alcocer para formar esa lista, según Nicolás, fue tan grande que llegó a pasar por encima de las aspiraciones del abogado Miguel Ángel del Río, quizá el jurista más petrista de las redes sociales y quien ha estado al frente de varias batallas judiciales que involucran a personas ligadas al Pacto Histórico.